24 marzo 2006

MEMORIA

Memoria no es lo mismo que recuerdo, recuerdo sin tomar acción, la memoria es activa, implica recuerdo, pero toma acción, toma forma de justicia,
de expresión,
de ronda de jueves,
de puño serrado y de causas abiertas,
de verdad dolorosa pero verdad siempre,

Memoria es un roble plantado en la plaza, donde los nietos trepa ramas, los hijos descansan su sombra,
la memoria es un hijo que lleva una boina con una sola estrella, no son muchas, muchas son avaricia, robo, ostentación, inutilidad, solo una estrella, solo un sol para nuestra tierra, debajo de ese sol somos iguales.

La memoria es una marcha donde circula un mate bien cebado, donde tu germen pasa a mi boca, donde siento en tu saliva el dolor de tu alma, y lo incorporo mio.

La memoria es un 24 de Marzo, un abrazo de pueblo, un pañuelo blanco, un amigo en Europa clavando la estaca azul de futuro,

La memoria es un llanto desgarrando en surcos la patria, donde sembraremos la esperanza que alimenta hijos, que detiene ladrones vestidos de empresa.

MEMORIA.

EXILIO


Querido Omar,
no te pedí permiso para publicar tu poema, te he faltado el respeto de es profeso, un intento, para que alguien mas pueda sentir el dolor de tu exilio, del exilio de miles y miles, para que podamos comprender, al menos un poco, el daño de estos dementes dictadores.
(el dibujito es del pequeño, te lo mande hace tiempo no se si te llego).

UN PUÑADO DE TIERRA

No quiero que me entierren en tierra de nadie.
Vivo sin patria
sin familia
en el exilio,
y solo pido
un pedazo de tierra,
de tierra mía.
Que sienta la fiebre de mis entrañas
que toque la lengua que le canta
que moje mi sangre
que brille de poesía.

Denme un pedazo
de esta tierra,
Quiero morir con mi madre,
madre patria
madre pueblo
madre hermanos
que ilumine mis ojos color de sangre,
ebrio de paz.

Aquí en este pueblo
está mi tierra.

Del libro "Tango, Toulouse, exil" Poemes de Omar Dinel.
pagina 168. publicado en 1984

Documentos sobre el golpe de 1976


En 1976, las Fuerzas Armadas lanzaron una vasta campaña de contrainsurgencia. Al final de ese año miles de personas serían ilegalmente detenidas, torturadas, asesinadas, y desparecidas. Entre las víctimas de ese año se encontraban una media docena de ciudadanos estadounidenses. En esta declaración chocante relatada por una de las víctimas al Departamento de Estado en Washington, ella dice...
El 30 de abril, tomé un micro para ir a casa. Había dejado panfletos anti gubernamentales sobre un banco en una plaza para evitar tenerlos conmigo. Fui arrestada por individuos vestidos de civil y otros de uniforme. El micro fue detenido y me tomaron del pelo y literalmente me bajaron del micro arrastrándome y también a un muchacho que estaba conmigo. Fui revisada y llevada a un auto de policía. Dije que el joven no tenía nada que ver conmigo. Encontraron un papel que estaba llevando que tenía los nombres de personas con las que estudiaba. Arrebaté el papel para intentar proteger los nombres. Fui golpeada violentamente. El micro fue detenido por bastante tiempo; fui llevada a la estación de policía. Un soldado o policía me dijo que hablara o que sería torturada.. Mis ojos fueron tapados, mis manos atadas y fui puesta contra una pared. Un artefacto eléctrico tocó mis manos. Después estaba en el piso. Parecía que estaba siendo golpeada. Mi ropa estaba siendo arrancada. Entonces creo que estaba sobre una mesa con 4 o 5 hombres inmovilizándome. Empezaron a usar la picana Después me ataron y me echaron agua encima. Podía sentir un ventilador. Me interrogaron, pero más que nada era dale. Ahí. Ahí. Ahí. En el área genital. Fui amordazada. Ahí fue cuando quizá me mordí. Debo haber estado amordazada después porque al principio hablé. Dijeron que me darían para que no pudiera tener hijos.
En mayo 1978, la Embajada de EEUU informó en un memorando que “torturas físicas continúan siendo utilizadas regularmente durante los interrogatorios de terroristas sospechados y de los llamados ‘criminales subversivos’ que no cooperan totalmente”.
Agrega "... si ha habido una reducción en las denuncias de tortura, esto no es porque la tortura se ha dejado de practicar, sino que deriva de la reducción en el número de operaciones porque el número de terroristas y subversivos ha disminuido," y que las desapariciones "incluyen no solo a los sospechados de ser terroristas, pero abarcan una gama más amplia de gente-por ejemplo, dirigentes laborales, trabajadores, sacerdotes, activistas de derechos humanos, científicos, médicos, y dirigentes políticos. Una ocurrencia dramática reciente fue el secuestro en Diciembre de cinco 'madres del los desaparecidos' y dos monjas francesas, cuyos cuerpos se descubrieron a orillas del mar."
JUNIO DE 1979: La Embajada de EEUU en Argentina manda "para los archivos permanentes del Departamento de Estado" una copia de las fichas de casi 10,000 casos de violaciones de derechos humanos (la mayoría desaparecidos)”
AGOSTO de 1979: La embajada pone al día acerca de los centros clandestinos de detención, y explica que la coordinación de operaciones secretas entre el Ejército, la Armada, la Fuerza Aérea, y la Policía Federal se realiza a través de grupos de tarea en la "Reunión Central" con sede en el Batallón de Inteligencia 601.La cadena de mando lleva directamente hasta el Comandante en Jefe del Ejército General Leopoldo
5 setiembre 1975
En una reunión en Washington James Buchanan, de la Oficina de Inteligencia e Investigación del Departamento de Estado, introduce a los oficiales estadounidenses "sobre la coordinación de los grupos terroristas en América Latina. Buchanan menciona que el terrorismo más virulento en América Latina ocurre en Argentina. Muertes debido al terrorismo han ido ocurriendo a razón de una por día. Los grupos terroristas están en ambos espectros, en la derecha y en la izquierda. Los de la izquierda están dominados por el ERP y los Montoneros...". En la derecha se encuentra la AAA [esta] es particularmente violenta y brutal, reflejando una tendencia sucia en la tradición de la derecha argentina que se remonta a 1930". El Señor Buchanan no ve una ofensiva contundente contra los terroristas en Argentina a menos que un gobierno militar asuma el poder".
7 Octubre de 1975
El Embajador Hill informa sobre la creación del Consejo de Seguridad Interna compuesto por el Presidente, todos los miembros del gabinete, y los tres jefes de las Fuerzas Armadas, así como la creación del Consejo de Defensa Nacional compuesto por el Ministro de Defensa y los tres jefes de las Fuerzas Armadas. Cinco meses antes del golpe de Estado, los nuevos decretos dan al Ejército "la coordinación de las autoridades nacionales, provinciales y municipales así como la planificación y la conducción de operaciones de las fuerzas militares, de seguridad y policiales en las actividades anti-subversivas". El Embajador Hill da la bienvenida "a los esfuerzos unificados para lidiar con el problema de la subversión"
18 de diciembre 1975
El Embajador Hill discute la continua crisis política y cómo "Las Fuerzas Armadas preferirían una solución constitucional, pero a falta de una, deberán intervenir ellos mismos." De hecho, Hill remarca que desde la reunión de oficiales de alto rango que se llevo a cabo el 5 de diciembre, los contactos militares de la Embajada dan por inevitable un golpe militar y que "... la mayoría de los observadores esperan que los militares actúen antes de marzo".
13 de febrero de 1976
MEMO SECRETO CON EL TÍTULO: Posible Golpe de Estado en Argentina
Respecto al régimen militar "esperamos que este sea amigable hacia los Estados Unidos... Sin embargo... un régimen militar en Argentina estará casi con certeza, involucrado en violaciones a los derechos humanos que podrían generar críticas internacionales...". Esperan un golpe moderado y legalista.
24 de marzo de 1976
Memo con Titulo: Fuerzas Armadas Argentinas toman el Gobierno
Tipo: Informe confidencial, Departamento de Estado
De: William D. Rogers, Secretario de Estado Asistente para Asuntos Interamericanos
Para: Henry Kissinger, Secretario de Estado
"El tan publicitado y esperado Golpe militar tuvo lugar en la argentina temprano por la mañana". Rogers menciona que la Junta le ha mandado a Estados Unidos una carta en la que le pide su reconocimiento. Dice además que los ciudadanos y los intereses norteamericanos no parecen estar en peligro; pero "…Hay serios problemas con el nuevo gobierno como resultado de su política respecto de la censura y los Derechos Humanos". El Embajador Hill coincidentemente estaba en Estados Unidos por unos pocos días.
Fecha: 29 de marzo de 1976, 19:45 horas
Titulo: La línea moderada de Videla se impone
Tipo: Telegrama secreto, Departamento de Estado
Hill informa con entusiasmo sobre la limpieza y eficiencia de quiénes son sus líderes y la actitud de moderación de Videla. Además estima que los abusos a los derechos humanos por las fuerzas de seguridad se han detenido. "Nuestras fuentes políticas… continúan expresando su sorpresa de que la Junta ha actuado con tanta moderación … Su política es respetar a los derechos humanos y esta tomando medidas para encarrilar a los comandantes locales que pudieran, excediendo sus instrucciones, los violen… historias de horror basadas en imaginación más que en hechos son inevitables".
23 de julio de 1976
En un cambio radical de su posición desde que la Junta llegó al poder, un cable para el Secretario de Estado de sumo secreto, la Embajada de los Estados Unidos reconoce la responsabilidad del gobierno de Videla en la "contraviolencia". "Los escuadrones de la muerte llamados Triple A, estaban actuando antes del Golpe de Estado del 24 de marzo, pero la mayoría de los argentinos esperaba que sus actividades finalizaran cuando se dio el Golpe. Sin embargo, este no fue el caso. Las acciones de los grupos paramilitares, o parapoliciales fueron en aumento desde el 24 de marzo. Los mismos no identificados Ford Falcon están siendo utilizados, y muchos Policías Federales que participaron en la Triple A están activos en las operaciones que se llevan a cabo. Estimaciones de cuántos han sido secuestrados ilegalmente se elevan hasta los miles, de los cuales muchos han sido torturados y asesinados. Muchas de las víctimas no han tenido relación alguna con el ERP, o con Montoneros. Los blancos han incluido a curas católicos, y miles de refugiados chilenos y uruguayos en la Argentina… "…[he aquí] el dilema en que se encuentra Videla. No desea ver dañada la imagen de su gobierno por los abusos de derechos humanos. Pero al mismo tiempo, su objetivo principal es el mismo que el de los de línea dura: derrotar a los terroristas de izquierda.
Octubre de 1976,
Título: Almirante Massera se reúne con corresponsales del exterior
El Embajador Hill le reporta a Washington acerca de los comentarios del Almirante Massera en una reunión privada con la prensa. Tras el asesinato de Orlando Letelier, las acciones tomadas por el Congreso de los Estados Unidos de cortar la ayuda financiera Massera dice que ‘ni la policía ni los militares tienen nada que ver con ese terrorismo, por lo que oficialmente conozco’...
9 de diciembre de 1976
"…Durante los tres años de administración Peronista (1973-1976), más de 2.000 argentinos murieron como resultado del terrorismo. Desde marzo, la violencia política a cobrado por lo menos 1,000 vidas..." "Las fuerzas de seguridad han llevado a cabo acciones drásticas en contra de los terroristas de izquierda, asesinando a cientos y arrestando a miles. En este clima ha continuado el terrorismo de derecha. Este terrorismo apareció primero bajo Perón en 1974. La más notoria de estas organizaciones era la AAA” Es razonable concluir que el contraterrorismo o terrorismo de derecha ha implicado elementos de las fuerzas de seguridad argentinas. No se han tomado medidas efectivas para controlarlo. Desde marzo de 1976 una amplia gama de individuos, e incluso ciudadanos comunes, han sido victimizados, incluyendo curas y refugiados políticos extranjeros. La tortura es usada por las fuerzas de seguridad para extraer información de algunos prisioneros, particularmente aquellos que se sospecha o se sabe son terroristas…"
21 de marzo de 1984
"Las relaciones entre el gobierno de Alfonsín y las Fuerzas Armadas parecen estar mejor de lo pronosticado por los pesimistas, pero aún existen problemas. Las Fuerzas Armadas aparentan aceptar el principio de liderazgo presidencial y Alfonsín reconoce la necesidad de obrar con precaución en asuntos militares, si es que quiere ser aceptado por las fuerzas. El cuerpo de oficiales parece dispuesto a aceptar recortes presupuestarios modestos, algún tipo de reorganización, y el castigo a los más corruptos y flagrantes violadores de derechos humanos durante la dictadura." "La mayoría de los militares fueron de algún modo partícipes de la lucha anta subversiva, incluyendo los aspectos más violentos. La política deliberada de las Fuerzas Armadas durante el momento pico de la lucha, de 1975 - 1978, era el asegurar que la mayoría de los oficiales, como también los no-comisionados, participaran en las operaciones anti subversivas. Según una fuente cercana a los oficiales de alto rango, había un OBJETIVO implicar a toda la institución por métodos que el liderazgo consideraba podrían ser posteriormente cuestionados."

Revelaciones sobre el golpe a partir de documentos desclasificados por los Estados Unidos



En la Argentina ya tuvimos acceso a memos y documentos de época que muestran el trasfondo de cómo se llega al Golpe y qué ocurre después. La información surge de desclasificación de más de 4000 documentos secretos sobre violaciones de derechos humanos durante la dictadura militar argentina, que fue iniciada por la administración de Clinton y completada por Bush. Se trata de informes desde la embajada en Buenos Aires (conducida por Robert Hill) al Departamento de Estado que manejaba Henry Kissinger.
Es material crucial para reconstruir los sucesos. Documentos secretos de EEUU constituyen una invalorable herramienta histórica y judicial. Con ellos trabajaron el Archivo Nacional de Seguridad de la Universidad G Washington y el CELS y la Universidad Di Tella de Argentina. El editor es Carlos Osorio, un salvadoreño que es director del Proyecto de Documentación del Cono Sur.
"Los documentos proporcionan pistas sobre el destino de las personas 'desaparecidas' en Argentina por un desenfrenado aparato de seguridad, y cuentan la historia de una campaña de contrainsurgencia masiva e indiscriminada llevada a cabo por la dictadura militar, apuntada a subversivos reales o imaginarios, incluyendo miles de dirigentes laborales, trabajadores, sacerdotes, activistas de derechos humanos, científicos, médicos, y dirigentes políticos," dice Carlos Osorio, director del Proyecto de Documentación de Argentina del National Security Archive.
Algunos temas clave que muestran los documentos:
Ya en 1975 (durante el Gob peronista) se planificaba y organizaba la represión. Sabían que sería clandestina e ilegal. Sabían que generaría quejas internacionales. Los militares sabían lo que hacían. No fue producto de errores, de excesos, en la lucha contra la guerrilla.
El rol de EEUU fue vital y controvertido. EEUU estuvo de acuerdo, hizo un guiño cómplice, sólo reclamó que no se genere algo parecido a lo de Pinochet.La Embajada y el Departamento de Estado mantuvieron una comunicación fluida con los militares durante los preparativos al golpe y estaban al tanto de que las violaciones a los derechos humanos aumentarían bajo la Junta. Es importante la demora del Embajador Hill en reconocer que hubo un drástico incremento de violaciones de derechos humanos y que la Junta Militar era la responsable. Recién a mediados de 1976 y ante la protesta de la comunidad internacional y el Congreso de Estados Unidos, el Departamento de Estado comienza a tomar una posición más crítica de la represión ejercida por la Junta.
Para EEUU el momento pico de la lucha antisubversiva fue entre 1975 y 1978. Es interesante el corte: el horror no empezó en 1976, con el Golpe. En sus informes EEUU destaca permanentemente el rol de la Triple A durante el Gobierno peronista. Según estos documentos, no hay un corte en 1976.
El Estado argentino junto a las dictaduras vecinas organizaron la represión interfronteras y transcontinental; siendo Argentina el centro de entrenamiento y teatro de operaciones principal de la Operación Cóndor.
La embajada de EEUU relata que la sociedad ve al Golpe como la forma de poner fin a la guerrilla. Creen que puede ser la forma de librarse de los Grupos paramilitares como la Triple A. Es decir, el Golpe acabaría con la guerrilla dejando sin razón de ser a la AAA. Paradójicamente EEUU ve como mejor solución el Golpe que a la ilegal AAA.
Según un documento de la SIDE de 1978, los militares ya contaban 22.000 muertos totales (de ambos bandos). Cifra escalofriante para ser de los propios militares.
Hay documentos espeluznantes del Batallón de Inteligencia 601 (dependiente de Galtieri que era jefe del Ejercito) con ordenes presuntamente de secuestro y ejecución. Se menciona día fecha y hora del operativo. Se cataloga a los objetivos como “de peligrosidad máxima”, de “peligrosidad menor”.
Emilio Massera se reúne con el embajador EEUU Hill y le asegura que el Régimen va a respetar los DDHH, que no va a ser como Pinochet. No, fue peor.
Los documentos hablan de la responsabilidad de políticos y sindicalistas: muestran que ambos le sueltan la mano al Gobierno de Isabel Perón. El secretario político del radicalismo Enrique Vanoli va a ver en abril del 76 a Videla. Este le asegura que estaba muy mal por ese tema, y que los secuestros y asesinatos no cuentan con autorización del Gobierno. Vanoli dice que Balbín le cree a Videla, y cree que no hay problema de DDHH. Según Videla, los excesos eran responsabilidad de MO desocupada y no del Estado operando en la clandestinidad.

CARTA ABIERTA DE RODOLFO WALSH A LA JUNTA MILITAR



1. La censura de prensa, la persecución a intelectuales, el allanamiento de mi casa en el Tigre, el asesinato de amigos queridos y la pérdida de una hija que murió combatiéndolos, son algunos de los hechos que me obligan a esta forma de expresión clandestina después de haber opinado libremente como escritor y periodista durante casi treinta años.
El primer aniversario de esta Junta Militar ha motivado un balance de la acción de gobierno en documentos y discursos oficiales, donde lo que ustedes llaman aciertos son errores, los que reconocen como errores son crímenes y lo que omiten son calamidades.
El 24 de marzo de 1976 derrocaron ustedes a un gobierno del que formaban parte, a cuyo desprestigio contribuyeron como ejecutores de su política represiva, y cuyo término estaba señalado por elecciones convocadas para nueve meses más tarde. En esa perspectiva lo que ustedes liquidaron no fue el mandato transitorio de Isabel Martínez sino la posibilidad de un proceso democrático donde el pueblo remediara males que ustedes continuaron y agravaron.
Ilegítimo en su origen, el gobierno que ustedes ejercen pudo legitimarse en los hechos recuperando el programa en que coincidieron en las elecciones de 1973 el ochenta por ciento de los argentinos y que sigue en pie como expresión objetiva de la voluntad del pueblo, único significado posible de ese "ser nacional" que ustedes invocan tan a menudo.
Invirtiendo ese camino han restaurado ustedes la corriente de ideas e intereses de minorías derrotadas que traban el desarrollo de las fuerzas productivtas, explotan al pueblo y disgregan la Nación. Una política semejante sólo puede imponerse transitoriamente prohibiendo los partidos, interviniendo los sindicatos, amordazando la prensa e implantando el terror más profundo que ha conocido la sociedad argentina.

2. Quince mil desaparecidos, diez mil presos, cuatro mil muertos, decenas de miles de desterrados son la cifra desnuda de ese terror.
Colmadas las cárceles ordinarias, crearon ustedes en las principales guarniciones del país virtuales campos de concentración donde no entra ningún juez, abogado, periodista, observador internacional. El secreto militar de los procedimientos, invocado como necesidad de la investigación, convierte a la mayoría de las detenciones en secuestros que permiten la tortura sin límite y el fusilamiento sin juicio.1
Más de siete mil recursos de hábeas corpus han sido contestados negativamente este último año. En otros miles de casos de desaparición el recurso ni siquiera se ha presentado porque se conoce de antemano su inutilidad o porque no se encuentra abogado que ose presentarlo después que los cincuenta o sesenta que lo hacían fueron a su turno secuestrados.
De este modo han despojado ustedes a la tortura de su límite en el tiempo. Como el detenido no existe, no hay posibilidad de presentarlo al juez en diez días según manda un ley que fue respetada aún en las cumbres represivas de anteriores dictaduras.
La falta de límite en el tiempo ha sido complementada con la falta de límite en los métodos, retrocediendo a épocas en que se operó directamente sobre las articulaciones y las vísceras de las víctimas, ahora con auxiliares quirúrgicos y farmacológicos de que no dispusieron los antiguos verdugos. El potro, el torno, el despellejamiento en vida, la sierra de los inquisidores medievales reaparecen en los testimonios junto con la picana y el "submarino", el soplete de las actualizaciones contemporáneas.2
Mediante sucesivas concesiones al supuesto de que el fin de exterminar a la guerilla justifica todos los medios que usan, han llegado ustedes a la tortura absoluta, intemporal, metafísica en la medida que el fin original de obtener información se extravía en las mentes perturbadas que la administran para ceder al impulso de machacar la sustancia humana hasta quebrarla y hacerle perder la dignidad que perdió el verdugo, que ustedes mismos han perdido.

3. La negativa de esa Junta a publicar los nombres de los prisioneros es asimismo la cobertura de una sistemática ejecución de rehenes en lugares descampados y horas de la madrugada con el pretexto de fraguados combates e imaginarias tentativas de fuga.
Extremistas que panfletean el campo, pintan acequias o se amontonan de a diez en vehículos que se incendian son los estereotipos de un libreto que no está hecho para ser creído sino para burlar la reacción internacional ante ejecuciones en regla mientras en lo interno se subraya el carácter de represalias desatadas en los mismos lugares y en fecha inmediata a las acciones guerrilleras.
Setenta fusilados tras la bomba en Seguridad Federal, 55 en respuesta a la voladura del Departamento de Policía de La Plata, 30 por el atentado en el Ministerio de Defensa, 40 en la Masacre del Año Nuevo que siguió a la muerte del coronel Castellanos, 19 tras la explosión que destruyó la comisaría de Ciudadela forman parte de 1.200 ejecuciones en 300 supuestos combates donde el oponente no tuvo heridos y las fuerzas a su mando no tuvieron muertos.
Depositarios de una culpa colectiva abolida en las normas civilizadas de justicia,incapaces de influir en la política que dicta los hechos por los cuales son represaliados, muchos de esos rehenes son delegados sindicales, intelectuales, familiares de guerrilleros, opositores no armados, simples sospechosos a los que se mata para equilibrar la balanza de las bajas según la doctrina extranjera de "cuenta-cadáveres" que usaron los SS en los países ocupados y los invasores en Vietnam.
El remate de guerrilleros heridos o capturados en combates reales es asimismo una evidencia que surge de los comunicados militares que en un año atribuyeron a la guerrilla 600 muertos y sólo 10 ó 15 heridos, proporción desconocida en los más encarnizados conflictos. Esta impresión es confirmada por un muestreo periodístico de circulación clandestina que revela que entre el 18 de diciembre de 1976 y el 3 de febrero de 1977, en 40 acciones reales, las fuerzas legales tuvieron 23 muertos y 40 heridos, y la guerrilla 63 muertos.3
Más de cien procesados han sido igualmente abatidos en tentativas de fuga cuyo relato oficial tampoco está destinado a que alguien lo crea sino a prevenir a la guerrilla y Ios partidos de que aún los presos reconocidos son la reserva estratégica de las represalias de que disponen los Comandantes de Cuerpo según la marcha de los combates, la conveniencia didáctica o el humor del momento.
Así ha ganado sus laureles el general Benjamín Menéndez, jefe del Tercer Cuerpo de Ejército, antes del 24 de marzo con el asesinato de Marcos Osatinsky, detenido en Córdoba, después con la muerte de Hugo Vaca Narvaja y otros cincuenta prisioneros en variadas aplicaciones de la ley de fuga ejecutadas sin piedad y narradas sin pudor.4
El asesinato de Dardo Cabo, detenido en abril de 1975, fusilado el 6 de enero de 1977 con otros siete prisioneros en jurisdicción del Primer Cuerpo de Ejército que manda el general Suárez Masson, revela que estos episodios no son desbordes de algunos centuriones alucinados sino la política misma que ustedes planifican en sus estados mayores, discuten en sus reuniones de gabinete, imponen como comandantes en jefe de las 3 Armas y aprueban como miembros de la Junta de Gobierno.

4. Entre mil quinientas y tres mil personas han sido masacradas en secreto después que ustedes prohibieron informar sobre hallazgos de cadáveres que en algunos casos han trascendido, sin embargo, por afectar a otros países, por su magnitud genocida o por el espanto provocado entre sus propias fuerzas.5
Veinticinco cuerpos mutilados afloraron entre marzo y octubre de 1976 en las costas uruguayas, pequeña parte quizás del cargamento de torturados hasta la muerte en la Escuela de Mecánica de la Armada, fondeados en el Río de la Plata por buques de esa fuerza, incluyendo el chico de 15 años, Floreal Avellaneda, atado de pies y manos, "con lastimaduras en la región anal y fracturas visibles" según su autopsia.
Un verdadero cementerio lacustre descubrió en agosto de 1976 un vecino que buceaba en el Lago San Roque de Córdoba, acudió a la comisaría donde no le recibieron la denuncia y escribió a los diarios que no la publicaron.6
Treinta y cuatro cadáveres en Buenos Aires entre el 3 y el 9 de abril de 1976, ocho en San Telmo el 4 de julio, diez en el Río Luján el 9 de octubre, sirven de marco a las masacres del 20 de agosto que apilaron 30 muertos a 15 kilómetros de Campo de Mayo y 17 en Lomas de Zamora.
En esos enunciados se agota la ficción de bandas de derecha, presuntas herederas de las 3 A de López Rega, capaces dc atravesar la mayor guarnición del país en camiones militares, de alfombrar de muertos el Río de la Plata o de arrojar prisioneros al mar desde los transportes de la Primera Brigada Aérea 7, sin que se enteren el general Videla, el almirante Massera o el brigadier Agosti. Las 3 A son hoy las 3 Armas, y la Junta que ustedes presiden no es el fiel de la balanza entre "violencias de distintos signos" ni el árbitro justo entre "dos terrorismos", sino la fuente misma del terror que ha perdido el rumbo y sólo puede balbucear el discurso de la muerte.8
La misma continuidad histórica liga el asesinato del general Carlos Prats, durante el anterior gobierno, con el secuestro y muerte del general Juan José Torres, Zelmar Michelini, Héctor Gutiérrez Ruíz y decenas de asilados en quienes se ha querido asesinar la posibilidad de procesos democráticos en Chile, Boliva y Uruguay.9
La segura participación en esos crímenes del Departamento de Asuntos Extranjeros de la Policía Federal, conducido por oficiales becados de la CIA a través de la AID, como los comisarios Juan Gattei y Antonio Gettor, sometidos ellos mismos a la autoridad de Mr. Gardener Hathaway, Station Chief de la CIA en Argentina, es semillero de futuras revelaciones como las que hoy sacuden a la comunidad internacional que no han de agotarse siquiera cuando se esclarezcan el papel de esa agencia y de altos jefes del Ejército, encabezados por el general Menéndez, en la creación de la Logia Libertadores de América, que reemplazó a las 3 A hasta que su papel global fue asumido por esa Junta en nombre de las 3 Armas.
Este cuadro de exterminio no excluye siquiera el arreglo personal de cuentas como el asesinato del capitán Horacio Gándara, quien desde hace una década investigaba los negociados de altos jefes de la Marina, o del periodista de "Prensa Libre" Horacio Novillo apuñalado y calcinado, después que ese diario denunció las conexiones del ministro Martínez de Hoz con monopolios internacionales.
A la luz de estos episodios cobra su significado final la definición de la guerra pronunciada por uno de sus jefes: "La lucha que libramos no reconoce límites morales ni naturales, se realiza más allá del bien y del mal".10

5. Estos hechos, que sacuden la conciencia del mundo civilizado, no son sin embargo los que mayores sufrimientos han traído al pueblo argentino ni las peores violaciones de los derechos humanos en que ustedes incurren. En la política económica de ese gobierno debe buscarse no sólo la explicación de sus crímenes sino una atrocidad mayor que castiga a millones de seres humanos con la miseria planificada.
En un año han reducido ustedes el salario real de los trabajadores al 40%, disminuido su participación en el ingreso nacional al 30%, elevado de 6 a 18 horas la jornada de labor que necesita un obrero para pagar la canasta familiar11, resucitando así formas de trabajo forzado que no persisten ni en los últimos reductos coloniales.
Congelando salarios a culatazos mientras los precios suben en las puntas de las bayonetas, aboliendo toda forma de reclamación colectiva, prohibiendo asambleas y comisioncs internas, alargando horarios, elevando la desocupación al récord del 9%12 prometiendo aumentarla con 300.000 nuevos despidos, han retrotraído las relaciones de producción a los comienzos de la era industrial, y cuando los trabajadores han querido protestar los han calificados de subversivos, secuestrando cuerpos enteros de delegados que en algunos casos aparecieron muertos, y en otros no aparecieron.13
Los resultados de esa política han sido fulminantes. En este primer año de gobierno el consumo de alimentos ha disminuido el 40%, el de ropa más del 50%, el de medicinas ha desaparecido prácticamente en las capas populares. Ya hay zonas del Gran Buenos Aires donde la mortalidad infantil supera el 30%, cifra que nos iguala con Rhodesia, Dahomey o las Guayanas; enfermedades como la diarrea estival, las parasitosis y hasta la rabia en que las cifras trepan hacia marcas mundiales o las superan. Como si esas fueran metas deseadas y buscadas, han reducido ustedes el presupuesto de la salud pública a menos de un tercio de los gastos militares, suprimiendo hasta los hospitales gratuitos mientras centenares de médicos, profesionales y técnicos se suman al éxodo provocado por el terror, los bajos sueldos o la "racionalización".
Basta andar unas horas por el Gran Buenos Aires para comprobar la rapidez con que semejante política la convirtió en una villa miseria de diez millones de habitantes. Ciudades a media luz, barrios enteros sin agua porque las industrias monopólicas saquean las napas subtérráneas, millares de cuadras convertidas en un solo bache porque ustedes sólo pavimentan los barrios militares y adornan la Plaza de Mayo , el río más grande del mundo contaminado en todas sus playas porque los socios del ministro Martínez de Hoz arrojan en él sus residuos industriales, y la única medida de gobierno que ustedes han tomado es prohibir a la gente que se bañe.
Tampoco en las metas abstractas de la economía, a las que suelen llamar "el país", han sido ustedes más afortutunados. Un descenso del producto bruto que orilla el 3%, una deuda exterior que alcanza a 600 dólares por habitante, una inflación anual del 400%, un aumento del circulante que en solo una semana de diciembre llegó al 9%, una baja del 13% en la inversión externa constituyen también marcas mundiales, raro fruto de la fría deliberación y la cruda inepcia.
Mientras todas las funciones creadoras y protectoras del Estado se atrofian hasta disolverse en la pura anemia, una sola crece y se vuelve autónoma. Mil ochocientos millones de dólares que equivalen a la mitad de las exportaciones argentinas presupuestados para Seguridad y Defensa en 1977, cuatro mil nuevas plazas de agentes en la Policía Federal, doce mil en la provincia de Buenos Aires con sueldos que duplican el de un obrero industrial y triplican el de un director de escuela, mientras en secreto se elevan los propios sueldos militares a partir de febrero en un 120%, prueban que no hay congelación ni desocupación en el reino de la tortura y de la muerte, único campo de la actividad argentina donde el producto crece y donde la cotización por guerrillero abatido sube más rápido que el dólar.
6. Dictada por el Fondo Monetario Internacional según una receta que se aplica indistintamente al Zaire o a Chile, a Uruguay o Indonesia, la política económica de esa Junta sólo reconoce como beneficiarios a la vieja oligarquía ganadera, la nueva oligarquía especuladora y un grupo selecto de monopolios internacionales encabezados por la ITT, la Esso, las automotrices, la U.S.Steel, la Siemens, al que están ligados personalmente el ministro Martínez de Hoz y todos los miembros de su gabinete.
Un aumento del 722% en los precios de la producción animal en 1976 define la magnitud de la restauración oligárquica emprendida por Martínez de Hoz en consonancia con el credo de la Sociedad Rural expuesto por su presidente Celedonio Pereda: "Llena de asombro que ciertos grupos pequeños pero activos sigan insistiendo en que los alimentos deben ser baratos".14
El espectáculo de una Bolsa de Comercio donde en una semana ha sido posible para algunos ganar sin trabajar el cien y el doscientos por ciento, donde hay empresas que de la noche a la mañana duplicaron su capital sin producir más que antes, la rueda loca de la especulación en dólares, letras, valores ajustables, la usura simple que ya calcula el interés por hora, son hechos bien curiosos bajo un gobierno que venía a acabar con el "festín de los corruptos".
Desnacionalizando bancos se ponen el ahorro y el crédito nacional en manos de la banca extranjera, indemnizando a la ITT y a la Siemens se premia a empresas que estafaron al Estado, devolviendo las bocas de expendio se aumentan las ganancias de la Shell y la Esso, rebajando los aranceles aduaneros se crean empleos en Hong Kong o Singapur y desocupación en la Argentina. Frente al conjunto de esos hechos cabe preguntarse quiénes son los apátridas de los comunicados oficiales, dónde están los mercenarios al servicio de intereses foráneos, cuál es la ideologia que amenaza al ser nacional.


Si una propaganda abrumadora, reflejo deforme de hechos malvados no pretendiera que esa Junta procura la paz, que el general Videla defiende los derechos humanos o que el almirante Massera ama la vida, aún cabría pedir a los señores Comandantes en Jefe de las 3 Armas que meditaran sobre el abismo al que conducen al país tras la ilusión de ganar una guerra que, aún si mataran al último guerrillero, no haría más que empezar bajo nuevas formas, porque las causas que hace más de veinte años mueven la resistencia del pueblo argentino no estarán dcsaparecidas sino agravadas por el recuerdo del estrago causado y la revelación de las atrocidades cometidas.


Estas son las reflexiones que en el primer aniversario de su infausto gobierno he querido hacer llegar a los miembros de esa Junta, sin esperanza de ser escuchado, con la certeza de ser perseguido, pero fiel al compromiso que asumí hace mucho tiempo de dar testimonio en momentos difíciles.

Rodolfo Walsh. - C.I. 2845022
Buenos Aires, 24 de marzo de 1977.




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1 Desde enero de 1977 la Junta empezó a publicar nóminas incompletas de nuevos detenidos y de "liberados" que en su mayoría no son tales sino procesados que dejan de estar a su disposición pero siguen presos. Los nombres de millares de prisioneros son aún secreto militar y las condiciones para su tortura y posterior fusilamiento permanecen intactas.


2 El dirigente peronista Jorge Lizaso fue despellejado en vida, el ex diputado radical Mario Amaya muerto a palos, el ex diputado Muñiz Barreto desnucado de un golpe. Testimonio de una sobreviviente: "Picana en Ios brazos, las manos, los muslos, cerca de Ia boca cada vez que lloraba o rezaba... Cada veinte minutos abrían la puerta y me decían que me iban hacer fiambre con la máquina de sierra que se escuchaba".

3 "Cadena Informativa", mensaje Nro. 4, febrero de 1977.


4 Una versión exacta aparece en esta carta de los presos en la Cárcel de Encausados al obispo de Córdoba, monseñor Primatesta: "El 17 de mayo son retirados con el engaño de ir a la enfermería seis compañeros que luego son fusilados. Se trata de Miguel Angel Mosse, José Svagusa, Diana Fidelman, Luis Verón, Ricardo Yung y Eduardo Hernández, de cuya muerte en un intento de fuga informó el Tercer Cuerpo de Ejército. El 29 de mayo son retirados José Pucheta y Carlos Sgadurra. Este úItimo había sido castigado al punto de que no se podía mantener en pie sufriendo varias fracturas de miembros. Luego aparecen también fusilados en un intento de fuga".


5 En los primeros 15 días de gobierno militar aparecieron 63 cadáveres, según los diarios. Una proyección anual da la cifra de 1500. La presunción de que puede ascender al doble se funda en que desde enero de 1976 la información periodística era incompleta y en el aumento global de la represión después del golpe. Una estimación global verosímil de las muertes producidas por la Junta es la siguiente. Muertos en combate: 600. Fusilados: 1.300. Ejecutados en secreto: 2.000. Varios. 100. Total: 4.000.


6 Carta de Isaías Zanotti, difundida por ANCLA, Agencia Clandestina de Noticias.


7 "Programa" dirigido entre julio y diciembre de 1976 por el brigadier Mariani, jefe de la Primera Brigada Aérea del Palomar. Se usaron transportes Fokker F-27.


8 El canciller vicealmirante Guzzeti en reportaje publicado por "La Opinión" el 3-10-76 admitió que "el terrorismo de derecha no es tal" sino "un anticuerpo".


9 El general Prats, último ministro de Ejército del presidente Allende, muerto por una bomba en setiembre de 1974. Los ex parlamentarios uruguayos Michelini y Gutiérrez Ruiz aparecieron acribillados el 2-5-76. El cadáver del general Torres, ex presidente de Bolivia, apareció el 2-6-76, después que el ministro del Interior y ex jefe de Policía de Isabel Martínez, general Harguindeguy, lo acusó de "simular" su secuestro.


10 Teniente Coronel Hugo Ildebrando Pascarelli según "La Razón" del 12-6-76. Jefe del Grupo I de Artillería de Ciudadela. Pascarelli es el presunto responsable de 33 fusilamientos entre el 5 de enero y el 3 de febrero de 1977.


11 Unión de Bancos Suizos, dato correspondiente a junio de 1976. Después la situación se agravó aún más.


12 Diario "Clarín".


13 Entre los dirigentes nacionales secuestrados se cuentan Mario Aguirre de ATE, Jorge Di Pasquale de Farmacia, Oscar Smith de Luz y Fuerza. Los secuestros y asesinatos de delegados han sido particularmente graves en metalúrgicos y navales.


14 Prensa Libre, 16-12-76.