MUROS (por Eduardo Galeano)

Gracias a mis primos "Los Luises" que me enviaron este material, - seguramente estara ya en miles de sitios -.

El Muro de Berlín era la noticia de cada día. De la mañana a la noche leíamos, veíamos, escuchábamos: el Muro de la Vergüenza, el Muro de la Infamia, la Cortina de Hierro...Por fin, ese muro, que merecía caer, cayó.

Pero otros muros han brotado, siguen brotando, en el mundo, y aunque son mucho más grandes que el de Berlín, de ellos se habla poco o nada.Poco se habla del muro que los Estados Unidos están alzando en la frontera mexicana, y poco se habla de las alambradas de Ceuta y Melilla.

Casi nada se habla del Muro de Cisjordania, que perpetúa la ocupación israelí de tierras palestinas y de aquí a poco será quince veces más largo que el Muro de Berlín. Y nada, nada de nada, se habla del Muro de Marruecos, que desde hace veinte años perpetúa la ocupación marroquí del Sahara occidental.

Este muro, minado de punta a punta y de punta a punta vigilado por miles de soldados, mide sesenta veces más que el Muro de Berlín. ¿Por qué será que hay muros tan altisonantes y muros tan mudos? ¿Será por los muros de la incomunicación, que los grandes medios de comunicación construyen cada día?-

-En julio del 2004, la Corte Internacional de Justicia de La Haya sentenció que el Muro de Cisjordania violaba el derecho internacional y mandó que se demoliera. Hasta ahora, Israel no se ha enterado. En octubre de 1975, la misma Corte había dictaminado: “No se establece la existencia de vínculo alguno de soberanía entre el Sahara Occidental y Marruecos”.

Nos quedamos cortos si decimos que Marruecos fue sordo. Fue peor: al día siguiente de esta resolución, desató la invasión, la llamada Marcha verde, y poco después se apoderó a sangre y fuego de esas vastas tierras ajenas y expulsó a la mayoría de la población.Y ahí sigue.

-Mil y una resoluciones de las Naciones Unidas han confirmado el derecho a la autodeterminación del pueblo saharaui.¿De qué han servido esas resoluciones? Se iba a hacer un plebiscito, para que la población decidiera su destino. Para asegurarse la victoria, el monarca de Marruecos llenó de marroquíes el territorio invadido. Pero al poco tiempo, ni siquiera los marroquíes fueron dignos de su confianza. Y el rey, que había dicho sí, dijo que quién sabe. Y después dijo no, y ahora su hijo, heredero del trono, también dice no.

La negativa equivale a una confesión. Negando el derecho de voto, Marruecos confiesa que ha robado un país. ¿Lo seguiremos aceptando, como si tal cosa? ¿Aceptando que en la democracia universal los súbditos sólo podemos ejercer el derecho de obediencia? ¿De qué han servido las mil y una resoluciones de las Naciones Unidas contra la ocupación israelí de los territorios palestinos? ¿Y las mil y una resoluciones contra el bloqueo de Cuba?

El viejo proverbio enseña:–La hipocresía es el impuesto que el vicio paga a la virtud.

El patriotismo es, hoy por hoy, un privilegio de las naciones dominantes. Cuando lo practican las naciones dominadas, el patriotismo se hace sospechoso de populismo o terrorismo, o simplemente no merece la menor atención.

Los patriotas saharauis, que desde hace treinta años luchan por recuperar su lugar en el mundo, han logrado el reconocimiento diplomático de ochenta y dos países. Entre ellos, mi país, el Uruguay, que recientemente se ha sumado a la gran mayoría de los países latinoamericanos y africanos. Pero Europa, no.

Ningún país europeo ha reconocido a la República Saharaui. España, tampoco. Este es un grave caso de irresponsabilidad, o quizá de amnesia, o al menos de desamor. Hasta hace treinta años el Sahara era colonia de España, y España tenía el deber legal y moral de amparar su independencia. ¿Qué dejó allí el dominio imperial? Al cabo de un siglo, ¿a cuántos universitarios formó? En total, tres: un médico, un abogado y un perito mercantil.

Eso dejó. Y dejó una traición. España sirvió en bandeja esa tierra y esas gentes para que fueran devoradas por el reino de Marruecos. Desde entonces, el Sahara es la última colonia del Africa. Le han usurpado la independencia.

¿Por qué será que los ojos se niegan a ver lo que rompe los ojos?¿Será porque los saharauis han sido una moneda de cambio, ofrecida por empresas y países que compran a Marruecos lo que Marruecos vende aunque no sea suyo?

Hace un par de años, Javier Corcuera entrevistó, en un hospital de Bagdad, a una víctima de los bombardeos contra Irak. Una bomba le había destrozado un brazo. Y ella, que tenía ocho años de edad y había sufrido once operaciones, dijo:–Ojalá no tuviéramos petróleo.

Quizás el pueblo del Sahara es culpable porque en sus largas costas reside el mayor tesoro pesquero del océano Atlántico y porque bajo las inmensidades de arena, que tan vacías parecen, yace la mayor reserva mundial de fosfatos y quizá también hay petróleo, gas y uranio.

En el Corán podría estar, aunque no esté, esta profecía:–Las riquezas naturales serán la maldición de las gentes.

Los campamentos de refugiados, al sur de Argelia, están en el más desierto de los desiertos. Es una vastísima nada, rodeada de nada, donde sólo crecen las piedras. Y sin embargo, en esas arideces, y en las zonas liberadas, que no son mucho mejores, los saharauis han sido capaces de crear la sociedad más abierta, y la menos machista, de todo el mundo musulmán.

Este milagro de los saharauis, que son muy pobres y muy pocos, no sólo se explica por su porfiada voluntad de ser libres, que eso sí que sobra en esos lugares donde todo falta: también se explica, en gran medida, por la solidaridad internacional.

Y la mayor parte de la ayuda proviene de los pueblos de España. Su energía solidaria, memoria y fuente de dignidad, es mucho más poderosa que los vaivenes de los gobiernos y los mezquinos cálculos de las empresas.Digo solidaridad, no caridad. La caridad humilla. No se equivoca el proverbio africano que dice:–La mano que recibe está siempre debajo de la mano que da.

-Los saharauis esperan. Están condenados a pena de angustia perpetua y de perpetua nostalgia.

Los campamentos de refugiados llevan los nombres de sus ciudades secuestradas, sus perdidos lugares de encuentro, sus querencias: El Aaiún, Smara...Ellos se llaman hijos de las nubes, porque desde siempre persiguen la lluvia.Desde hace más de treinta años persiguen, también, la justicia, que en el mundo de nuestro tiempo parece más esquiva que el agua en el desierto.

Sin Verguenza

Recuerdo hace algunos años, escuchar a mi abuela decir viejo “sin vergüenza”. Esta era la mayor ofensa, la peor sentencia del juicio practicado por la sociedad, ser un “sinvergüenza” era lo peor, de lo peor.
La vergüenza en este caso, no significaba sonrojar por hacer el ridículo, el sin vergüenza, como sentencia del juicio mas duro de la sociedad, se relacionaba a lo inescrupuloso, a lo fuera de la ley o muy cerca de estarlo.

Y el que efectivamente se encontraba fuera de a ley, ya no tenia perdón, simplemente era un delincuente.
En este contexto, la vergüenza oficiaba de limite, separaba lo bueno de lo malo, mantenía a raya a los picaros y ventajeros.

Claro, que con la llegada del capitalismo, los valores pasaron a ser, solo monetarios. Hoy no tener vergüenza es una nimiedad.

Al amparo del poder que da la riqueza, algunos (cada ves mas) perdieron la vergüenza y transgredieron la ley. Tanto que el perjuicio hacia sus pares, sus hermanos, sus vecinos, sus parientes, no tiene parangón.
Han mutilando, en lo mas profundo, al ser humano. Así lo hambrean, lo desvalorizan, lo quebrantan en su voluntad, lo desmoralizan, le refriegan la injusticia en la jeta.

Así, sin vergüenza, sin escrúpulos, sin ley, sin humanidad y en nombre del capital que supimos conseguir, volvieron a delinquir contra los obreros de Nueva Mente.

Ayer miércoles realizaron su marcha del Miércoles. Mientras caminábamos bajo un cielo amenazante y con un viento fresco de lluvia cercana, entre cuetes y palmas que daban el marco de quienes quieren ser escuchados, se acercaron algunos y me comentaron tener esperanza, la esperanza de que hoy Jueves, en el dialogo acordado con la patronal le ofrecieran lo justo, lo bueno, lo de ellos.

Lamentablemente, lejos de traer soluciones, trajeron un puñado de documentos listos para firmar, preparados de ante mano, para ser aceptados sin enmiendas.
Sin que siquiera tuvieran a mano un abogado, sin que el ministerio de trabajo mandara un representante, o el sindicato estuviera presente, obligados por el pan que apura las decisiones, muchos trabajadores estamparon su acuerdo.
Un sin numero de condiciones que evaden toda ética, y toda ley, que echan por tierra años de luchas y de mejoras logradas, pisoteadas en minutos.

Condenados a recibir sin derecho a reclamo, apenas un pequeño porcentaje de lo que se les adeuda y quedando literalmente desvinculados de la empresa, es decir, en el mismo acto, mediante un único documento, perdieron derecho a reclamo y pusieron engañosamente en manos del patrón, la renuncia a los puestos de trabajo.
Es perverso acordar cuando el hambre llama, cuando la presión de la necesidad obliga, es perverso señalar con el dedo a quien se lo acorrala indefenso, y se lo trata de revolucionario, reaccionario o kilombero (para adecuarlo al idioma argentino).

La verdad, ya sin marcha, sin derechos, sin apoyo, y ante los ojos cerrados de tanto politicucho avieso, sentí que todo era un grito en la nada, un grito que me devuelve como eco, la palabra esclavitud.
Nunca tuve tantas ganas de gritar “hijos de puta” pero como decía mi abuela, mejor llamemos a las cosas por su nombre, SIN VERGÜENZAS DELINCUENTES.

Video "vaciamiento de la fabrica"

Aquí, les dejo un pequeño video, a propósito del cierre y vaciamiento de la fabrica de calzados “Nueva mente”, espero que lo puedan ver, como sabrán no soy experto en esto del audio y el video, simplemente con un poco de esfuerzo y autoaprendizaje trato de que tengan en sus casas algo de lo que pasa por estos pagos, por lo demás sepan disculpar.

Por ultimo hagan clik en el siguiente link http://blip.tv/file/get/Fuserito-AltaEnElCielo728.wmv puede tardar un poquito en bajar (dos o tres minutos), pero creo vale la pena.

Hasta la próxima.

Nueva Mente: ESTAFADOS

Parece ser que la única manera de generar riqueza es generar mucho mas pobreza.

Esta ecuación se viene repitiendo a través de décadas y se ve muy acrecentada ahora que el capitalismo se ha globalizado íntegramente, la idea de que todos podemos ser ricos es una ilusión que venden los capitalistas como espejitos de colores.

La receta para lograr el bienestar económico que proponen, es, hacer igual que hacen ellos, por suerte esto no es posible, de ser así convertiríamos a las naciones del mundo en estados súper corruptos.

Casi siempre, salvo raras excepciones, la riqueza se logra a través de manejos corruptos de información, lobby o influencias con el poder y los poderosos, coimas, manipulación de la ley y su interpretación, propaganda tendenciosa, robo de guante blanco, y hasta terrorismo de estado, tal las acciones de EEUU por el mundo, saqueando petróleo, o Europa instalando papeleras, que llevaran papel para los hijos del primer mundo, y aquí, nuestros hijos muriendo de a poco por la contaminación y el analfabetismo.

Todos estos avasallamientos generan bronca que terminan en protestas, cortes de rutas, manifestaciones, comedores, carpas blancas, rondas de jueves, etc. que molestan a los ricos, que ven amenazados sus oscuros negocio.

Serán ellos los que rápidamente compraran al periodismo para que calle, o para que desinforme, compraran a los sindicalistas de mala leche para que embarren la cancha, untaran a los abogados para que fallen quiebras o permitan testaferros que pongan a resguardo la riqueza acumulada, golpearan las puertas de los cuarteles, para que impongan por la fuerza sistemas económicos, nefastos para el pueblo, (y muy útiles para los intereses del capital), aunque esto implique la destrucción de la educación, del pensamiento, de la opinión dispar, la desaparición de personas, o incluso, implique, poner en riesgo a toda una nación con una guerra perdida de ante mano.

Pero claro, no vivimos en un sistema MORALISTA o SOCIALISTA, un sistema a donde los valores morales o sociales importen, este es un sistema CAPITALISTA, la única razón, es la que tiene el capital.
Los Sres. del robo, los corruptos, los mafiosos seguramente serán premiados con los múltiples beneficios de su condición de ricos.

En nuestro medio, en nuestro pueblo eso también ocurre, aquí donde nos conocemos todos y parecemos todos iguales, vivimos permanentemente pisados por los poderosos. En general esto se venia dando entre los políticos locales y los vecinos relacionados, que hacían y dejaban hacer inocentes maniobras que favorecían a la elite, actos que no dejaba de ser una inocentada pueblerina.

Lamentablemente esto cambio con la importación de corruptos y ladrones de afuera, que vienen con otro training, con otras relaciones, con otras intenciones que van mas allá de conseguir una entrada al partido de Voley o evitar la cola del banco. Estos vienen a sembrar de verdad, mas de la corrupción argentina, a robarle a al pueblo.

Así llego la cárcel de Urdampilleta donde políticos irresponsables movidos por oscuros intereses, propiciaron la instalación de un cáncer en el seno de una sociedad desprotegida. Los demás callaron, cómplices.

Así, como caído del cielo, llego el equipo de Voley que se presto para que en el fragor de los festejos se ocultara la verdad de un Intendente que mantiene un sequito de mujeres de inexplicable prontuario.

Mientras las maquinas del municipio o del pueblo, para hablar con propiedad, salen a diario para hacer trabajos particulares a amigos del poder, mientras el chacarero que espera la reparación de su camino, paga coimas encubiertas a un director vial que pide incesantemente el bono de combustible.

A otros se le rellenan terrenos, gratis. O se le hacen cordón cuneta, aunque estén fuera del ejido urbano, mientras Doña Rosa embarra sus guardapolvos en fangosas calles, o toma agua de dudoso contenido mineral, o pelea con ridículos inspectores que reclaman el uso de un casco, (del cual estamos de acuerdo), mientras decenas de obras en construcción sacan a la vereda sus pertrechos sin el mas mínimo cuidado de la seguridad. Incluida, por su puesto la casa del propio intendente, en plena Av. San Martín, comprada en circunstancias que invitan a la sospecha.

O las grandes gomerías, que ocupan la vereda con gomas gigantescas que pesan toneladas, o reparan los vehículos sobre la misma acera a metros de supermercados donde circula gran caudal de gente, incluido niños, sin que nadie vea el peligro que esto encierra.

No son invisibles, los camiones de combustible, ingresando a la ciudad a cualquier hora y que ya han costado la vida de personas. De jóvenes personas.

No es invisible a los ojos del pueblo como crecen algunos comercios, donde no se dan facturas de venta ni se sabe, como, cuando y a quien compran. Mientras la AFIP persigue a los Don Nadie y a los que pretenden mantener un laburo sin robar.

No es invisible tampoco, la ola de robos de hacienda y de campos, a manos, no de rateros, si no de ladrones organizados y bien conocidos por todos, donde los principales sospechados son los que deben controlar la seguridad y evitar el delito.

Esto, entre otras tantísimas irregularidades, en el hospital, el cementerio, obras publicas, Cenasa, etc etc y a las que se suman empresas, que aportan su cuota de irregularidades y su contaminación ambiental (PCV), acallada no por la vía legal, si no por la vía extrajudicial, la falta de licitaciones publicas, el amiguismo, etc. A la que agregamos el trabajo en negro de los que se jactan de ser exportadores, y que “truchan” análisis o pagan certificados de Cenasa por debajo de la mesa.

A este caldo de cultivo ya bastante hervido, se le agrega ahora, el cierre de la fabrica de calzado, que se abrió con la finalidad de ser cerrada. ¿cómo? preguntara Ud., el negocio no es fabricar zapatillas de dudosa calidad que se venden a dudosos precios en ferias paraguayas, antros de corrupción que políticos, y autoridades de todo orden comparten.

El negocio es hacer un poco de movimiento, traer algunas maquinas viejas, y mover algunos escombros, generando en la población una predisposición a recibir a brazos abiertos la nueva fuente de trabajo. Endiosando inconscientemente a los empresarios y su tan noble gesto. Predisponiendo a los medios y demás chupa medias al comentario elogiador.

Al poco de andar se traban relaciones con el poder político que deslumbrado por tanto despliegue de capital y viendo que pueden llevar algo de agua para su molino se convierten en socios, ayudando con sus relaciones, a tramitar créditos blandos que nunca se pagan, y que, Doña Rosa no tiene la mas mínima posibilidad de conseguir. (Para ella solo tenemos unos ordinarios colchones en los días previos a las elecciones).
Eso sí, una ves embolsado el dinero del préstamo, se presentan quiebras, dejando a un centenar de ilusiones en la calle y sin la mas mínima posibilidad.

La cadena de responsabilidades es grande, y difícil de comprender, Las autoridades ponen a disposición maquinas y recursos municipales, pagados por el pueblo para facilitar la instalación, entrega terrenos, y todo tipo de ayuda, que los empresarios toman gustosos ahorrando gran parte del dinero destinado a poner en marcha la empresa. Y de paso hacer mas caja para llevarse.
Tampoco ayuda el sistema judicial y los abogados que tardan una eternidad en dar solución a los conflictos, invitando a la conciliación sin pensar en el obrero y mas bien favoreciendo al empresario que es el que pagara con creces sus honorarios que luego disfrutaran en las playas de países vecinos.

La policía a las ordenes de jueces hambrientos de capitalismo dará palo al obrero cuando este, en su desesperación, reclame lo que es justo y propio.

El robo esta a punto de culminar, la operación desgaste esta en marcha, ahora que la cosa esta como esta, no esperamos menos del Sr. intendente para con los muchachos de la fabrica, para con sus familias, para con sus hijos, que quedaron en la calle, y que meses atrás con su voto lo pusieron en el poder.

Supongo se convertirá ahora en un ser solidario y humano, prestara los camiones municipales para que dispongan, o ayudara con escenarios y equipos de audio, con el estadio municipal o el complejo, para organizar la resistencia que tomara forma de arte, de música, de recital, de olla popular, de teatro callejero, de panfletos informativos, para que la opinión publica se entere que nuestros vecinos han sido golpeados por la corrupción, por el capitalismo y sus garras de oro.
Para que los jueces, los abogados y los mismos empresarios entiendan que también existe el valor moral, el valor social.

Los pobres también pagamos impuestos, cuando compramos alimentos, combustible para nuestras estufas, ropa, calzado, útiles escolares, remedios, pagamos, encubiertamente, impuestos incluidos, nuestro dinero pasa a engrosar la bolsa que el poder ordeña en favor de estos mafiosos.

Por eso se necesitan muchos pobres para mantener unos pocos ricos, millones de pobres (mas de 25 millones de argentinos viven por debajo de la línea de pobreza) recaudan millones para los créditos de las obras que emprenderán los conductores de TV, las aceiteras, las fabricas de calzado, etc.

Así es la vida del pobre, así se recalienta la situación, lenta pero progresivamente, no nos sorprenda entonces, un mayor índice de delitos, un mayor desgano de los trabajadores, un especial desinterés de la juventud, una bronca colectiva, por tanto manoseo, por tanta falta de respeto, por tanta perdida de dignidad.

Tengámoslo en cuenta algún día pueden pedirnos, lo que les pertenece.

A 24 años de Malvinas

Se cumplirán mañana 24 años del desembarco argentino en las Islas Malvinas y el comienzo de la absurda guerra de nuestro país contra Gran Bretaña. En este enfrentamiento bélico, el poder político implementado por la fuerza, recurrió a lo más profundo del sentimiento argentino, para lograr sus más oscuros objetivos: perpetuarse en el poder.
Se mostró la decadencia de un gobierno de facto que fracasó en lo político, económico y social, con una escasa visión de la política internacional, provocando heridas muy difíciles de cerrar. Bastaron 72 días para reflejar las miserias del poder interno, el poderío de los ingleses apoyados por Estados Unidos y lo absurdo de subestimar el sentido de orgullo nacional de los británicos, sobrestimando la capacidad de Argentina. Es hora de comprender aquello que afirmaba el escritor francés Fénelon (1651-1715): "La guerra es un mal que deshonra al género humano".Nuestra memoria evoca a los 649 argentinos caídos en la Guerra de Malvinas y valora la acción de los veteranos. Desde la rendición, en junio de 1982, la situación de los ex combatientes fue motivo de ocultamiento y, en alguna medida, de desdén. Casi un cuarto de siglo después, los 454 suicidios de ex combatientes muestra que no ha existido una política de asistencia eficaz para atenderlos. En la sociedad, la relación con los veteranos es ambigua; hay un reconocimiento del sacrificio por la Patria, pero no demasiado interés en el tema. Políticamente, los votos de los ex combatientes son pocos y dar beneficios a ex combatientes no genera demasiado reconocimiento en el electorado. A ello hay que agregar una situación de inequidad que se debe reparar. Hay 20.000 personas que reciben beneficios como ex combatientes, pero el personal que estuvo en las islas es aproximadamente la mitad: se extendió la condición de ex combatiente a quienes actuaron en el conflicto desde el continente, y ello generó situaciones abusivas. Tanto el Gobierno como la sociedad debieran otorgar más importancia a aquellos miles de argentinos que dieron su esfuerzo y su sangre por la Patria, y con quienes aún se está en deuda.